10.1.05

- Blogsesión

...Como la mayor parte de los fenómenos del mundo mundial, el tema de los blogs desata pasiones y obsesiones. Yo misma soy una víctima; cada mañana me descubro mirando los mismos blogs que me apasionan, dejando comentarios en ellos, sintiendo sana envidia por su creatividad, persevarancia y éxito, y me enfrento al mío, a la pestañita de "Blog This!" que me deja en blanco, o vomitando en ella mis experiencias, deseos o frustraciones. Demasiado a menudo cualquier blogmaster se pregunta qué día se le ocurrirá a tal o cual linkearle o qué día reunirá por fin valor para adoptar nuevas ciberpersonalidades en alguna página, simplemente para ver si cambiando de máscara lo que diga puede interesarle a alguien.
Y es que al fin y al cabo, tantas formas de comunicación tal vez no hacen más que aislanos y demostrarnos en realidad cuán solos estamos.
Es decir, si alguien lee lo que has escrito tal vez es porque le interesa, o por puro morbo, o tal vez para saciar su ansia de comunicación. En cualquier caso, quien se expone en un blog desea saber por qué le lee la gente, pero sucede que no acostumbra a haber feed-back, usease, que el blogmaster se queda con su deseo de comunicación tan sólo medio satisfecho, como cuando le hablas a la pared. Sí, es cierto; hablas, pero no obtienes respuesta.
Supongo que pretender que eso fuera distinto sería igual de complicado que intentar que la gente fuera sincera en sus relaciones interpersonales, cara a cara. Y eso, por lo que yo sé, es una de las cosas más complicadas que existe.
Malditos ataques de frustración...

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