9.3.06

El orgullo de ser maruja

Tal vez sea una reacción de los primeros días en casa, pero estoy en un plan marujil salvaje. Sí; hablo con las vecinas, saco al gato a dar un paseo, limpio y, sobre todo, guiso. Preparo comida como para dos más de los que somos (no hay problema; mi suegro está encantado de la vida) y preparo platos de esos elaborados, previa ensaladita que, a veces, nos saltamos. Anteayer para comer cociné Tajín de cordero, por la noche empanadillas, ayer a mediodía pollo al teriyaki, por la noche empanada gallega, y hoy al mediodía un marmitako de atún. Por la mañana salgo a tomarme un café y voy a comprar, y me paro enfrente de los alimentos a ver qué me sugieren. Y os aseguro que me cantan la traviata... Son absolutamente sugerentes.
Cuando mi señor marido llega al mediodía tiene la comida lista y nos sentamos tranquilamente y charlamos un rato. Después se echa media horita y otra vez al tajo. Y yo me pongo a mirar con pereza mis apuntes de la universidad mientras hago lavadoras (los cubos de la ropa sucia parecen pozos sin fondo) y voy viendo como la gente se chilla en la tele.
Y lo cierto es que disfruto mucho. Hago cosas que me gustan, que me llenan el tiempo de pequeños placeres y tengo una gratificación cuasi-inmediata (aunque las manos me queden absolutamente secas). Lo más probable es que acabe con un par de kilos de más, pero me da lo mismo, porque estoy convencida de que tampoco va a durar mucho. Pero mientras os dejo regocijaros com ni imagen en rulos y con bata de guatiné trajinando entre ollas y pucheros. Surrealista, ¿eh?.

3 comentarios:

Pucela dijo...

Señorita, quitando de lo sugerente y fetichista de imaginarla a Ud. en rulos y guatiné, la putada es no ser de vecindad barceloní para comprobar "in situ" eso de los guisos (bueno, no sólo "comprobarlos, ya me entiende usted).

Unknown dijo...

¡Queremos fotos! X-D

Capitan Napalm dijo...

AaaaaaaaaRAARRRGGHHHHHHH

AAAARRrrrrrrrrrrrrrhgggggggh

¿Donde está el cuero y la gorra que me pone?