Hoy es mi primer día tras las vacaciones. Qué queréis; se va sobrellevando, pero se me ha hecho durillo.
La verdad es que no he aprovechado demasiado estas dos semanitas; teniendo en cuenta el tiempo que ha hecho, que el santo varón de mi marido no tenía ya vacaciones y las opciones del momento he hecho cosillas, pero no demasiadas. Y cuando puenso sobre ello me asalta la sensación de que no he sabido aprovechar el merecido descansillo que tenía.
Pero basta de lamentaciones; vuelta a empezar. Trabajo, universidad, otoño. La liturgia de cada año. En cierta manera resulta reconfortante, aunque me cueste reconocerlo. Es bonito pensar que, al menos, puedo estar orgullosa de haber sabido tirar del carro un año más.
Alba Celaya salta con Bamby en abril de 2023
Hace 1 año
2 comentarios:
Para ser una buena pesimista, mejor dí: "un año menos" ;)
P.D. Noséquecosa en tu blog me pide passgüord al acceder. Eso sí, si paso de ello me deja acceder...
lo peor no es que te pida password, lo peor es que no carga las actualizaciones.
o que nur ya no quiere publicar nada, cosa que es de extrañar.
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